miércoles, 8 de julio de 2009

If I wake Up and I see my Maker Comming (nada que ver con lo escrito, sólo es BECK)

A media semana de una rutina bastante interesante, comer, ver películas, series o caricaturas, componer canciones y ponerse loco hasta que dan las 12 de la noche, después sólo hay que dormir y despertar al día siguiente por ahí de las 7:30 para volver a las mismas actividades. Si así será mi vida de asalariado no me parece una tan mala. Hago lo que me gusta y se va el tiempo con gran rapidez. 

Lo que más me agrada de todo esto es la poca necesidad que he sentido últimamente de estar en linea. Sólo entro a revisar el correo, myspace, facebook y la ocasional aparición de personas en el messenger, es todo, nada demasiado elaborado o tardado. Lo interesante de todo esto es saber que tus amigos se encuentran bien enganchados en esto de la etapa 2.0 del internet y de que no pueden estar desconectados por más de dos horas porque sienten que el mundo se les viene abajo, a pesar de que ellos saben muy bien que NO IMPORTA si están o no en linea, si hablan o no hablan con alguien, si revisan o no las alertas del facebook, si responden los mensajes en el myspace o si no ven el nuevo video hilarante en youtube.

Uno de los placeres mundanos más grande que tengo y que jamás podré dejar de lado es la música, escuchar discos como el Midnight Vultures de Beck simplemente me hacen recordar porqué me fascina la búsqueda de nuevas bandas, a pensar de que ya sé que prácticamente es imposible hallar dos agujas en el mismo pajar. Creo que esa era la razón principal por la que solía conectarme, para bajar cuantos discos fueran posibles y conocer todas las bandas que pudiera, tener un bagaje musical, pero olvidé en el camino que super-especializarte termina por crear una brecha entre tú y tu entorno, pues llegas al grado de clavadéz que muy pocos saben de lo que estás hablando, obviamente sin intención de que se afecten unos a otros, pero pasa y eso está gacho.

Por ahora lo único que queda es seguir la rutina, la (aún) tan divertida rutina que le da sentido a los días de la semana, (al menos de lunes a jueves) que tan monótona y desagradable se puede tornar y ni hablar de los fines de semana, demasiado alcohol, risas y desveladas para un cuerpo un poco reacio ante la situación.

Bien, creo que ya escribí suficiente como para tranquilizar mis dedos inquietos